Chavorruca

Jéssica de la Portilla Montaño. ¿Chavorruca o "chavoruca"?

Chavorruca

A un mes y días de cumplir muchos años… muchos, muchísimos años. No escribo la cifra exacta, como para qué: cualquiera que googlee mi nombre podrá saber la ciudad en que nací y cuándo. El significado de chavorruca es una chica de cierta edad, inalcanzable por la diferencia de años, si tú quieres terminaría de criarte..
Diría que es difícil confesar que estoy por cumplir ene cantidad de inviernos, pero es mentira: hasta ahora he dicho mi edad sin problema, hasta divertida ante la sorpresa ajena. Tengo buenos genes maternos.
Yo no salía ni a la esquina sin dos capas de rímel y el párpado inferior delineado, genio y figura, vanidosa para unos y superficial para otras.
\"Significado
Nunca he sido de quitarme la edad. Como para qué. De broma dices que ya es hora de restarte años, pero al final lo que cuenta no es cómo te ves sino qué tal te sientes.
Eso es lo más jodido del asunto.
¿Y tú cómo te sientes a tus veintitantos, treinta y tantos, o más? ¿Cómo vas con tu dolor de espalda tóxico?
Aquí comienzas a contar anécdotas:
\”Me acuerdo…\”.
\”A tu edad…\”.
\”Cuando era joven…\”.
\”Si yo hubiera…\”.
\”La sejuela…\”.
Y la peor de todas:
\”En mis tiempos…\”.
Ya soy una chavorruca. No sé desde cuándo lo soy. Chavorruca. ¿Cuál es el rango imaginario para definirte como una?
\"Chavorruca
 

Chavorruca o chavoruca a treinta y cuatro días

Hace tiempo una prima escribió una nota sobre \”El terror de los treinta\”. De cuando uno escribía notas en su Facebook… Ya llovió. Ya estuvo. Estoy vieja. Jurassic Park es la prehistoria de Chabelo.
Alguna vez tuvimos veintisiete, edad del Club de los Músicos Muertos. Él bromeaba sobre su hereditaria calvicie. Le llevo tres meses de edad y cachito, pero quiso traumarme con que yo cumpliría treinta antes que él. ¿Eso qué? No estuvo ahí para burlarse cuando los cumplí. Ni yo estuve cuando él los cumplió.
Cuando llegué a Guanajuato, me pidieron el IFE en un billar que ya no existe.
En algún momento comenzaron a decirme \”señora\”. Eso sí que me traumaba bastante. ¿Acaso parezco? ¿Será por lo gorda?, ¿porque compro la despensa?, ¿porque ya no utilizo tacones ni siquiera en bodas? ¿Soy la señora de la casa? ¿Cuánto cuesta hoy un kilo de tortillas?
No falta quien me hable de usted, sobre todo clientes de lectura de cartas que me contactan por primera vez.

Organismo jodido, rostro más o menos firme

Una amiga se hizo estudios porque empezó con un dolorcito. Luego de sus resultados preliminares, decidí agendar con mi médico. Me salté dos chequeos anuales pues las enfermeras del IMSS nos atendían en las instalaciones de mi último empleo. Ni me acordaba de padecimientos mortales desde el recorte que me obligó a emprender mi negocio de Tarot por internet.
(Por cierto: necesito ver otra vez Web Therapy, con Lisa Kudrow.)
Después de regresar de mi cita llamé al nutriólogo. Aún faltan mis resultados completos. Dudo mucho morir pronto; a estas alturas como que ya para qué.
Solo es cosa de tener unas pinzas para arrancar los cabellos. En esa fase de chavorruca me encuentro.
Reflexionaría filosóficamente sobre las vueltas que da la vida, las oportunidades perdidas que no aproveché en su momento, el extraño destino al casarme con mi primer amor y todo eso… Pero falta poco para la medianoche. Chavorruca que se respete se acuesta temprano. Sobre todo si es sábado. Chavorruca que se respete se acuesta temprano. Sobre todo si es sábado. Chavorruca que se respete veía al Tío Gamboín y el monólogo de Adal Ramones.

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

A %d blogueros les gusta esto: