Socavón de Reforma, CDMX: Explicación histórica

Socavón de Reforma, Ciudad de México, en el cruce de las calles Humboldt, Cristóbal Colón y la lateral de Paseo de la Reforma.

 

¿Por qué la CDMX se hunde?

 
Lo primero que tenemos que saber es que la Ciudad de México se asentó sobre un sistema de lagos que la historia denomina “Lago de Texcoco”. Segundo, que la Ciudad de México se localiza en el Valle de México, y que es atravesado por el Eje Volcánico. Tercero, el territorio mexicano se encuentra afectado por cinco placas tectónicas (Norteamericana, Pacífico, Caribe, Cocos y Rivera).
Conclusión: México está condenado a sismos, temblores, socavones, inundaciones y, lo increíble, a volcanes.
La desecación de la Ciudad de México nunca fue total y la naturaleza siempre impone sus caminos naturales. La edificación citadina se impuso artificialmente en masas acuosas. Además de los lagos existían ramales de ríos y ojos de agua, lagunas y arroyo.

Consecuencia: El socavón de Reforma se debe a que la Ciudad de México está sobre un sistema de canales subterráneos.

El movimiento constante de las placas tectónicas y la actividad interna de algunos volcanes permiten el ablandamiento de la tierra, por lo que se manifiestan hundimientos en diferentes partes de la capital.
\"Socavón
Los aztecas no alteraron tanto el terreno natural. Prefirieron construir chinampas y respetar los cauces de los ríos.
En el siglo XVI los españoles iniciaron la construcción de la Ciudad de México. Y ya desde aquel entonces la capital del virreinato fue objeto de incontables inundaciones. Las autoridades del virreinato se dieron a la tarea de desecar la cuenca lacustre formada por cinco lagos.
Realizaron entonces obras de desagüe para los lagos de Zumpango, Xaltocan, Texcoco, Xochimilco y Chalco. Crearon un drenaje y construyeron diques en la sierra de Guadalupe, al norte del lago de Texcoco y en el Cerro de la Estrella. Es decir, la mayoría de masa acuífera de la ciudad virreinal se contuvo. Y, para el presente, la naturaleza se impone, retoma los caminos, y donde se hicieron obras aparecen socavones, derrumbes, fallas.
A esto agreguen que la mayoría del drenaje de la CDMX es bastante viejo. En algunos sectores fue de mala calidad e insuficiente para la densidad poblacional. Como resultado se empezarán a manifestar hundimientos, algunos pequeños y otros más grandes.
Hoy en TodoMePasa.com pueden leer la publicación humorística que al respecto escribió mi editora y esposa: Socavón en Reforma: CDMX se hunde bajo el peso de la ineptitud.
 

Imágenes:  HoyTamaulipas.net

viajandoporlahistoriaconaris.blogspot.mx

 

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

A %d blogueros les gusta esto: