El circo mediático: sobre los políticos mexicanos

El circo mediático: sobre los políticos mexicanos

El circo mediático hace héroes y condena a villanos. La divulgación de una noticia puede tener todos los matices, puede generar escándalos o exponer una noticia mesurada. Hay para todos los gustos.
Los políticos son el centro en estos días tan aciagos. Sus promesas, o mejor dicho sus mentiras, representantes de Satanás, Dios nos libre de cruzarnos con un político. El charolazo, la promesa, el salto a otra curul y otro sexenio de más promesas incumplidas.
(Este escrito es interactivo, usted pone a los políticos.)
La novedad en el circo mediático es que ahora son diputados y senadores multipartidistas.
No existe la fidelidad al partido. Inicio como priísta, cambio al panismo y me afilio al nuevo Morena. Además, no hay político pobre. Pueden ser ignorantes, corruptos, transas, gordos, feos, mujeriegos, misóginos, güeyes. Pero jamás pobres.
Reciben su dieta, bono, vales, seguridad, etc. Y, ¿qué es lo que hacen? Han de hacer algo muy importante con las prestaciones que reciben. De seguro son la primera fila de defensores de la Nación. No han de permitir el abuso, el secuestro, el fraude electoral, defienden los derechos de los mexicanos. Sí, cómo no.
Son la clase parasitaria más cara del mundo, cobardes, hocicones, iletrados, retrasados, agachones, sinvergüenzas, cínicos, etc., etc., etc.

Si el circo mediático vende periódicos, no puede haber mejor arma contra la crisis actual

Todos llenan las primeras páginas de los rotativos entre dimes y diretes y el ciudadano común solo observa sus transas, impotente e indignado. Porque el aparato del Estado los protege y los engorda como auténticos cerdos.
Sí existen diputados que hacen su trabajo con dignidad y empeño. Pero son los menos y de los que la prensa casi no habla porque esos están trabajando. Y no tienen tiempo para declaraciones.