Feliz feliz cumpleaños a mí…
Por fin terminó mayo… lo cual es una suerte porque si no seguiría celebrando: 6 de mayo mi aniversario de bodas (cero y llevamos cinco años juntos, vaya aguante de mi amado), 10 de mayo mi segundo día de las madres festejando el tener a la niña más hermosa de México entre mis brazos, y 17 de mayo, mi feliz feliz cumpleaños que, como siempre conmigo, fue todo un show: El plan original era cambiar mi día de descanso para poder comer el martes 17 con mi esposo y mi hermosa Aranza, pero en la oficina se complicó el asunto porque soy medio indispensable (padres de familia: pongan a sus hijos a estudiar inglés) y pues ni modo, ni que fuera yo diputada plurinominal para faltar cuando quiera o dormirme en la chamba, ¿no? Ese día simplemente desperté y me encontré con este bello panorama:
¿Qué más le puedo pedir a la vida que un feliz feliz cumpleaños con ella?
Toda la mañana me la pasé con Arancita, lo normal: darle su desayuno (avena en agua, alguna fruta, alguna proteína, onzas y onzas de leche materna a demanda, por más que me digan que ya deje de darle porque no alimenta y es pura agua y que ya está grande y que blaaa, al parecer medio mundo tiene mucho que opinar), jugar con ella, verla hacer monadas como intentar comer a mordidas (con sus seis dientes) una manzana, sin entender por qué hacía berrinche cuando se la quitaba para dársela raspada con cucharita, pues no: resulta que su niñera le pela la fruta para que Aranza la muerda, o al menos haga como que la muerde, jaja.




Por supuesto que NOOO diré dónde porque, clásico de los clásicos, cuando llegas y preguntas si tienen la promoción que anuncian en un espectacular ENFRENTE, pasando el bulevar, que se alcanza a ver perfectamente desde tu mesa, te dicen que sí; PERO a la hora de la cuenta te salen con que “es de 5 a 8 de la tarde” y tú así de ah pues va, excelente servicio, muchísimas gracias, nos vemos pronto… yo creo que en mi siguiente feliz feliz cumpleaños… que sea en año bisiesto… ¡y que caiga en domingo! ¡ADIÓS!!! Así que omito el nombre para no quemarlos por su publicidad falsa ni recomendarlos a pesar de la excelente comida. No es mi culpa 🙂


…con el guapísimo Abraham Téllez España, compañero egresado de la Escuela de Escritores de México SOGEM Coyoacán. ¡Y mi hija se enamoró de él, por cierto! Pero eso ya lo contaré la siguiente vez.
Y vaya que fue un feliz, feliz cumpleaños. Finalizo con algunos de los regalitos de Héctor: decoración de globos, y alcancías para mi colección de cochinitos.

Felicidades¡¡¡¡ por todo el mes de celebración.