Just a dream

Nunca me cansé de hablarte, nunca me aburrí de decir los \”te amo\” que no llegaron a tus oídos. No me quisiste como yo a ti (qué raro), igual y porque entonces ostentaba un nombre que ni siquiera fue el mío. Hace tanto de eso, ¿cuánto ha pasado? Creí que podrías ser eterno en mi corta biografía, creí que serías por quien yo dejara escuela y familia. Pocos me recuerdan por el papel que jugué ayer, por un personaje que apenas si le dio sentido a mi fase de ir tras de ti con cierta precaución. En realidad nunca fue para tanto, no te enterabas ni tenías interés y daba lo mismo despedirme de ti con un beso en los labios de otra persona. Hoy puedo ver tu foto sin soltar ni un suspiro, puedo bromear contigo sobre el pasado que no compartimos y dejar que atisbes en mi futuro mientras lo hagas a lo lejos.

Fallece Gustavo Cerati, de Soda Stereo



No estoy llorando: son las hormonas…

Ahora recuerdo a ese tonto que no llegó (¿o llegó tarde?) a mi comida de cumpleaños número equis. De regalo me llevó un disco de Korn porque pensó que me gustaba. De ahí nos fuimos directo a la tienda MixUp a cambiarlo por el de Sueño Stereo, de Soda Stereo, el álbum donde viene la de \”Zoom\” y una llamada \”Planta\” que no había escuchado pero me traumó.

Oh sí, casi lo olvido: también viene la cantadísima \”Ella usó mi cabeza como un revólver\” (no creerías las cosas que he hecho por ella).

También recuerdo a ese otro tonto con el que alguna vez hablé por teléfono para despedirnos por milésima vez en la vida, y me salió con su jalada de \”gracias totales\”, palabras con que Cerati finaliza la canción de \”De música ligera\” en concierto.

Ahora me toca rastrear la noticia para el periódico pero no voy a llorar, no puedo llorar más porque se me corre el maquillaje y dirán que ando de sentimental por culpa de las hormonas. Mejor que digan eso, porque justo hace rato en mi Twitter escribí sobre \”Las canciones que hoy te gustan porque hace mil años te hacían llorar y ni recuerdas por qué o por quién\”. Si me pongo a buscar en mi memoria o en mis diarios, seguramente encontraré al menos mil momentos más relacionados con Soda Stereo y personas que para el caso hoy se encuentran tan muertas para mí como yo para ellas.

Me aguanté las ganas de llorar por Robin Williams, pero Cerati ni siquiera tuvo el poder de decidir dejarnos en el momento que él quisiera, cuando quisiera aplicarse una autoeutanasia.

Por favor: ya no le den malas noticias a mi panza durante los próximos seis meses.

Buenos días Ramón

Buenos días Ramón

Buenos días Ramón (Guten Tag, Ramon)

Ojalá en la vida real todas las historias de migrantes fueran más o menos así:

Ramón (Kristyan Ferrer) ha intentado cruzar la frontera con Estados Unidos cinco veces, pero siempre lo regresa \’la Migra\’ antes de lograrlo. En la última ocasión salvó la vida de milagro pues los polleros abandonaron el camión sin ningún remordimiento.
\"Buenos


Ramón tiene dos opciones para ayudar a su mamá (Arcelia Ramírez) y a su abuela (Adriana Barraza): quedarse en su pueblo y trabajar para \’el Chiquis\’, que quién sabe en qué  negocios sucios anda, o intentar nuevamente cruzar la frontera con el vecino país del norte.

En una de esas, un amigo (Hector Kotsifakis) le hace la pregunta que cambiará su destino y el de su familia: 

¿Por qué no te vas para Alemania?
Ramón consigue dinero vendiendo un terrenito (que de todas formas ocupaban sin su permiso) y se lanza con sus pertenencias en una mochila a un país desconocido, donde hablan un idioma del que no entiende ni jota, a buscar a la tía del amigo que supuestamente vive a orillas del río Rin. ¿Qué pasará con él?

Buenos días Ramón es una película positiva, bonita y realmente divertida. Una cita de Jorge Ramírez-Suárez super recomendable, que te dejará un buen sabor de boca y que con todo gusto volveré a ver. 
\"Buenos

Cuarto aniversario


Hoy hace cuatro años, viernes por la mañana, tomé mi mochila con ropa para tres días y una bolsa, caminé cinco cuadras sobre Avenida Taxqueña hacia la Central de Autobuses del Sur, entregué mi boleto y subí al transporte que me trajo a León. Diría que me trajo y ya no regresé, pero en realidad una semana después estaba de regreso en casa de mi mamá para que mi familia conociera a Héctor, hoy mi esposo, y para recoger mi ropa. 

Así fue como de buenas a primeras terminé viviendo en \”la ciudad de las nubes\”. Cuatro años después he echado raíces en un lugar que me encanta a pesar de algunos males menores (el relajo que últimamente se traen con la basura, la falta de cultura del agua, la gente que no te saluda aunque te vea diario) que se compensan viviendo en un lugar más  tranquilo que el DF, con un perro enano que ya tiene a su hermanito y con muchos planes para el futuro.



Hoy cumplo cuatro años viviendo en León, cuatro años de novia del amor de mi vida, cuatro años de haber dejado definitivamente la casa materna y la ciudad contaminada que me vio crecer. No extraño lo que dejé atrás, sólo a  familia pero para eso hablamos diario a través de internet.

¡Nuevo bebé! Tifón, perrito rescatado recién adoptado



Por ahora sólo tengo disponible esta foto, pero sirve para presentarles oficialmente a Tifón, nuevo miembro de mi aún pequeña familia, adquirido el día de hoy en el Adoptón de Fundación Animare León. 

Tiene aproximadamente tres años de edad, es raza mixta tirando a shnauzer, rescatado de la calle con algo de desnutrición. Lo elegimos porque es cariñoso y convive con otros perros, pues nuestra intención primordial es que el Domi tenga compañía y, obviamente, darle un hogar a un hermoso perrito rescatado. 

En principio pensábamos en una perrita pues al parecer es más sencillo que se adapte una \”parejita\” macho-hembra, pero ya se habían llevado a todas las pequeñas (y eso que llegamos tempra al evento) y de pronto vi a Tifón… y me vio… o no creo que me haya visto, pero yo sí lo vi, mi esposo lo vio, Domi lo olió…

De un tiempo a la fecha, desde que los guarros de mis vecinos vagos dejan un perro negro en la calle y sin correa aunque ha atacado e incluso fracturado a perritos y hasta a niños (ven que en León dejan a los niños en la calle casi todo el día sin supervisión alguna), el Domi se volvió medio arisco a raíz de que el canijo perro feo intentó atacarlo, y ahora no podía acercársele ningún \”machín\” sin que le gruñera o de plano le soltara la mordida. Pues bien: a Tifón lo olió y lo siguió oliendo y nada, ni un ladrido ni gruñido ni absolutamente nada, así que de entrada vamos bien. 

La Niña TodoMePasa dice: (I)

 
 
¡Hola, qué tal!, ¿cómo están? Yo ni les digo: ando feliz de la vida (como siempre, como siempre) por la oportunidad de escribir en La Lista para Leer.
 
Aprovecharé que está de moda la Copa del Mundo para hacer lo que mejor hago: quejarme amargamente (¡buaaah!). A ver, que alguien me explique: ¿Quién dijo que hacer deporte era para nosotras las frágiles mujeres?
 
Alguna vez me lo advirtió una tipa gacha y fea que me hacía la vida de cuadritos cuando trabajé para Gobierno Federal: y ni creas, mamacita, que esa cintura que tanto presumes te durará después de los 25.
 
Por supuesto que NO le creí ni media palabra porque estaba loca —ella, no yo—, así que seguí comiendo sano y haciendo una abdominal cada mes.
 
…pero entonces, de un día para otro y así nomás, me mudé a León. Cuando me di cuenta, ya había subido no diez, no doce: subí DIECISIETE kilos en menos de cuatro meses.
 
Hay que decir que llegué aquí con un ligero bajopeso, pero vaya que resentí el cambio porque de buenas a primeras dejé de transbordar en el Metro, dejé de perseguir peseros y de correr pa\’ que no me alcanzara ningún defeño. Eso sin contar que Héctor, mi esposo y profe de secu (algún día les contaré esa historia) cocina tan rico como mi primo el Chef Omar Montalvo. Para colmo, soy fan de comer queso, papa y elotes. ¿Qué ente maligno inventó el menjurje llamado \’Dorilocos\’?
 
Lo que realmente me afectó fue dejar el ejercicio: un día iba bajando las escaleras cuando zaaas, azoté derechito al piso y me torcí un tobillo. Por eso dejé de entrenar Hula (aro), ejercicio que ya NO recomiendo porque es de alto impacto para espalda y cadera.
 
¿Por queeé nadie me dijo que \’deporte\’ puede transformarse en \’lesión permanente\’?
 
En enero de este año decidí regalarme diez kilos menos… ¡y lo logré en cuatro meses! Sin gotas ni pastillas ni masajes ni tratamientos raros, es más: ni siquiera requerí de un nutriólogo. En lugar de eso retomé algunas recetas como mi famoso licuado de All-Bran y los hot-cakes de avena, compré una escaladora elíptica acorde a mi presupuesto y recurrí a mi perdidísima fuerza de voluntad.
 
¿Quieres saber más al respecto? ¡Nos leemos el próximo lunes, va!
 
Twitter: @TodoMePasa

Faraway

 
 
Antes que tú poblaron la soledad que ocupas, 
y están acostumbradas más que tú a mi tristeza. 
 
Ahora quiero que digan lo que quiero decirte 
para que tú las oigas como quiero que me oigas.
 
-Poema 5, Pablo Neruda.





Fuiste tú y sigues siendo tú, así será siempre y no importa ya más. Aun si tu voz no me hace reír, no existen recuerdos que aún me hagan llorar. 

Sigues siendo tú. 

Un atisbo de nostalgia para volver a sentir, para transportarme al instante en que creí que tú eras para mí y que tal vez podía ser yo quien sí te hiciera feliz. La mujer que conociste de niña y que por ti se puso a escribir cartas ridículas que nadie publica porque no se me da la gana que conozcan la historia completa.

Nunca importó estar lejos porque así se acostumbraba. Nunca creí que tú ibas a consolarme en mis peores momentos porque eres el único que aún me conoce a pesar de la distancia, a pesar de los límites que tú solo impusiste. Al menos puedo decir que también te enamoraste de mí, al menos puedo decir que fuiste no un capítulo sino la espina dorsal de toda mi biografía. 




Eres el único que podía retarme y cagarme y salir con tus frases clásicas (\”no te entiendo, Jéssica\”). Fuiste el único que pronunciaba mi nombre para que yo soñara puras tonterías. 

De vez en cuando pienso en ti así sea para contar los días, así sea para reafirmar mi promesa de no joder tu existencia como tú hiciste con la mía. 

Sé que tú sientes lo mismo así sea sólo en Navidades, siempre lo fui para ti por más que renegaste y por más que huiste, por más que preferiste mirar a otra parte cuando había terceras personas presentes. 

Pero qué tal los meses de noches tan cortas en que yo te enseñé cómo quería que tú y sólo tú me besaras, en que yo te mostré lo que aprendí cada vez que te ibas, cada que me dejabas. 

Ahora soy dueña de mi propia codependencia. Sólo hay dos cosas por las que hubiera vendido mi alma y hace mil años que renuncié a ellas… pero eso no evita que de vez en cuando lamente el haber dejado de ser una necia. 

Sé que si hoy te llamara me contestarías con tu clásico \”¿qué onda?\” para mandar a la goma todo con tal de hablar conmigo durante horas y horas después de años y meses.

Lo que no he de decirte es el total de palabras que dediqué a ti y sólo a ti, lo que no he de confesar es que aún bastan tus viejas canciones para transportarme mágicamente a nuestros años juveniles en que lloraba porque no me querías. 

Tal vez jamás me amaste tanto como yo creí amarte a ti, pero al menos fuiste parte mía porque yo así lo decidí. El que ya no revele mis sentimientos no significa que hayas dejado de ser mi estúpida vida: monótona, vacía, sin más ilusiones ni chiste porque tú te quedaste con mi locura, tú me robaste las ganas de comerme entero el planeta…

¡La Niña TMP is back!!


¡Así es!!!

Como que ya me gustó esto del periodismo… Así que decidí celebrar 7 años (creo) de TodoMePasa regresando como columnista a un periódico:

Se llama La Lista para leer, es de distribución gratuita y -lo mejor de lo mejor- el tiraje diario es de 30 mil ejemplares para empezar. ¿Así o más bestseller???

Me he divertido mucho con este nuevo proyecto. He estado escribiendo de todo un poco a nombre de \”Redacción\”: los chismes de Espectáculos, noticias nacionales e internacionales, más lo que vaya surgiendo. Por ejemplo, en nuestros primeros números me aventé uno de mis temas favoritos:


Yo, especialista en perros – ya saben que los educo, los entreno, los adiestro, los dulcifico…

Experta en literatura – eso ni se discute, ¡o sí!!!

¡Ahora hasta experta en modas soy!


Pues heme aquí, en mi segundo día de descanso (viernes y sábado, #LikeABoss!!!). No sé si el proyecto sea temporal o no porque al parecer estoy demasiado cotizada en mi área, jajaja, y pues ya dependerá de si quieren tener calidad en La Lista para leer o un simple panfleto chafa tipo Publimetro.

Mientras tanto no me queda más que agradecer porque, ahora sí, puedo decir que me pagan por escribir, por editar y -lo que más me gusta de todo- por seguir corrigiendo erratas ajenas.

Luego les paso aquí el primer número de mi columna de \”La Niña TodoMePasa\”, tengo que buscar el respaldo en la compu de mi oficina.

¡Diviértanse!!!