Destete exitoso: La última teta y nos vamos a vivir la infancia

Destete exitoso: Los últimos consejos

para mamá y la teta cansada

Texto: Anadarinka Guajardo,

lactivista certificado

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Anadarinka Guajardo. Consultor, lactivista certificado por WIC. CN0 097332506

  Lee la entrega anterior haciendo clic en este link.   Durante el destete respetuoso pueden aparecer agitaciones directamente relacionadas con retorno de la menstruación después del nacimiento del bebé:
  • Si se produce un nuevo embarazo.
  • Si se amamanta a dos hijos a la vez (lactancia materna en tándem).
  • Si el niño amamantado tiene alrededor de dos años de edad.
  • O en épocas de mucho estrés y ansiedad de la madre.
Los síntomas son los siguientes:
  • Angustia indefinida.
  • Rechazo a dar el pecho.
  • Malestar emocional y físico.
  • Emociones contradictorias y culpabilidad.
  • Impaciencia por que la toma termine.
  • Dolor o hipersensibilidad por la aproximación de la ovulación y/o menstruación.
  • La mejor manera de lidiar con la agitación es llegar a un diálogo con el lactante, tomar un pequeño descanso, y legitimar tus emociones sin sentirse culpable.
Cuando se comienza el destete se deben manejar bien estas emociones porque habrá un pico que tomará toda la presión para el destete nocturno. Si el destete diurno ha llegado a su fin y se ha mantenido por lo menos tres semanas, es momento de: Abrocharse el cinturón, comprar una crema para las ojeras y un termo para café… Y prepararse para el destete nocturno. Habrás notado ya, sobre todo si tu hijo tiene entre dos y tres años, que las tomas que no hace de día las quiere hacer de noche. Y, por su puesto, es todo lo contrario de lo que deseamos. Entonces el pequeño tirano estaría tomando venganza… pero en realidad no es así. Lo que sucede es que el lactante recurre a su deseo desde el inconsciente. Ahora habrá que recordarle lo importante que es dormir de corrido.

Las primeras tomas que habrás de eliminar para el destete son las que están más próximas del amanecer.

Deberás levantarlo más temprano si es posible, o tomarlo en brazos y cantarle. El primer método es escoger juntos una canción de cuna que le parezca muy suave y relajante. Puedes poner esta canción cuando duerme y cantársela al despertar para que se grabe en su subconsciente. Puede cantarla contigo antes de la siesta y juntos pueden hacer una pequeña mímica. En el destete las guerras se juegan batalla a batalla. Papá incluso puede sacarte del parámetro visual y auditivo del lactante (por no decir: mandarte a dormir al sillón) para fomentar el sueño más tranquilo del infante. Algunas madres deciden no atender al menor y sacrificar algunos minutos de llanto para que papá llene de besos y abrazos al lactante herido por la falta de teta. En este destete dormir será más difícil, pero hay buenas noticias: La falta de sueño en los lactantes solo dura pocos días. Antes de dormir, algo de yoga para bebés y algunas carcajadas liberarán suficientes endorfinas para relajar el cuerpo del infante. Leer en este punto es una alternativa altamente sana y recomendable, ya que se estimulan procesos cognitivos y la imaginación.

Cantarle, mecerlo y abrazarlo es básicamente lo que se puede hacer de noche.

Algunos padres ofrecen agua o leche tibia. Algunos prefieren que el infante acepte que no hay motivos para despertarse y se mantienen firmes en no ofrecerle ningún líquido a menos de que el lactante lo pida. Es importante no encender luces ni jugar. La hora de dormir es sagrada y los infantes deben dormir un promedio de once horas por noche y una hora de siesta durante el día. El destete nocturno se concluirá después de los primeros quince días de continuidad. Lo principal es mantener el estado de ánimo tranquilo y asertivo. Aceptar que el niño está sufriendo en mayor o menor medida. Y reparar ese daño mediante la empatía y las muestras de afecto.

Conclusiones sobre el proceso del destete:

El amor todo lo puede. Nuestra tarea como padres de crianza respetuosa es guiar al infante por los medios más simples y respetuosos para crecer y afrontar nuevos retos. Tomar en cuenta sus necesidades y escuchar esas pequeñas voces que expresan sus necesidades de manera rudimentaria. Cuando el niño se ha desbordado de emociones y está abrumado, debemos hacernos presentes física y conscientemente. Preguntarnos “¿Qué siente?, ¿Qué piensa?” nos ayuda a comprender y empatizar con las emociones de los niños. Luego podemos decirles qué es lo que sienten (enojo, miedo, tristeza, nostalgia) y podemos solucionar los problemas con actividades sencillas y divertidas. Cuando ya ha regresado la calma, podemos hacer una pequeña reflexión y buscar acciones que anticipen los momentos difíciles.

El destete representa una etapa de transición, en la que muchos lactantes dejan de ser bebés y se aventuran a la infancia plena.

Llevarlos de la mano a través de esta serie de procesos, con amor, es la mejor manera en que podemos ayudarlos a crecer. Puede sonar increíblemente difícil y suele ser agotador, pero es mucho más fácil que utilizar métodos que perturben sus emociones, como: Recurrir a remedios picantes, café, y negaciones. La teta es vida, y estarán en contacto con ella por mucho tiempo. Habrá una fijación al pecho porque les recuerda el estado de calma de sus primeras percepciones y en ellos ese recuerdo es vívido y palpitante. Dejemos en la memoria de nuestros hijos un trato amable y respetuoso, para que ellos sean un espejo de bondad en el futuro.  ]]>

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